Colonia armenia en Sudamérica: identidad y compromiso
La inmigración armenia no es numerosa, pero es activa en Latinoamérica, y apoya la autodeterminación en Nagorno-Karabaj.
Empezar de cero
Las persecuciones y matanzas de armenios por parte del imperio otomano, que más de 30 países han reconocido como genocidio armenio, generó la gran diáspora actual. A partir de 1915, miles migraron hasta América Latina, especialmente Argentina, Uruguay y Brasil. En Buenos Aires se asentó el mayor número de migrantes armenios (foto). Hoy en Argentina alcanzan los 150 mil.
Creciendo con el idioma
Desde el principio, transmitir la cultura y el idioma fue fundamental. Por eso una de las tareas prioritarias que emprendieron los armenios fue construir colegios para educar los niños en las tradiciones y costumbres de su pueblo. Esta escuela primaria en Buenos Aires fue una de las primeras.
Aporte a la educación
Hoy Argentina cuenta con siete colegios armenios en Buenos Aires y otro más en Córdoba, donde también hay una importante colonia armenia. En Montevideo, Uruguay, hay tres centros educativos. En este acto en la escuela pública Armenio-Argentina de Buenos Aires, las banderas son signo de hermandad entre ambos países.
Herencia cultural
Las expresiones artísticas acompañaron a los migrantes armenios en su nueva vida en América Latina. Este conjunto en Argentina es precursor de numerosos grupos de baile y canto que formaron para continuar viviendo su cultura. También cuentan con periódicos, eventos deportivos, celebraciones de festividades típicas y cementerios armenios.
Un lugar de encuentro
Las tradiciones armenias han pasado de generación en generación entre los descendientes, como una forma de mantener la identidad de este pueblo. En la Sala Siranush del Centro Armenio de Argentina se presentan espectáculos de música y danza armenia. El auditorio es además en un espacio para otras manifestaciones culturales de la capital argentina.
Ara Malikian: estrella armenia
Las presentaciones del destacado violinista Ara Malikian, de origen armenio, son todo un suceso. Su repertorio va de las piezas clásicas a la música tradicional armenia. Sus recitales en Chile, Argentina y Uruguay no sólo congregan a la comunidad migrante local, sino que a un amplio público que admira su virtuosismo y carisma. Aquí, de visita en una escuela armenia en Buenos Aires.
Catedral armenia
La Iglesia Apostólica Armenia tiene un valor fundamental para la diáspora. En el barrio de Palermo, en Buenos Aires, está la catedral armenia San Gregorio el Iluminador. Inspirada en la arquitectura armenia, se construyó en 1936 gracias al aporte de la comunidad. Aquí preside la ceremonia el Primado de la Arquidiócesis de Argentina y de la Diócesis de Chile, arzobispo Kissag Mouradian.
Uruguay: pionero en la solidaridad con Armenia
La colonia armenia en Uruguay es de unos 15 mil miembros, una de las mayores del país sudamericano, donde recibió un temprano apoyo político. En 1965, Uruguay fue el primer país del mundo en reconocer oficialmente el genocidio armenio, cuando se cumplían 50 años de su ocurrencia. Esta marcha en Montevideo retrata un momento histórico de la relación entre ambas naciones.
Conflicto no resuelto
El compromiso se sigue manifestando hoy en las calles con marchas en Uruguay (foto), así como en Argentina y Chile, países que reconocieron el genocidio armenio en 1987 y 2007, respectivamente. La escalada en el conflicto por la región de Nagorno-Karabaj, de población mayoritariamente armenia, pero bajo tuición de Azerbaiyán, moviliza a las comunidades armenias en Sudamérica.
Protestas frente a embajadas
También en Buenos Aires se han registrado masivas marchas en rechazo a los ataques de Azerbaiyán a Nagorno-Karabaj. Con letreros y banderas, los manifestantes expresan su preocupación por un conflicto que revive las heridas del genocidio. La pandemia no ha impedido que se congreguen frente a las embajadas de Azerbaiyán y Turquía.
Por la paz y la autodeterminación
En más de un siglo, las comunidades armenias latinoamericanas se han integrado y aportado en diversas áreas de la sociedad. Hoy se unen en las manifestaciones por el derecho del pueblo de Nagorno-Karabaj a la paz y la autodeterminación y piden que sea reconocido como estado por la comunidad internacional.
A pesar de no ser la más numerosa en América Latina, la inmigración armenia se destaca por su lucha para preservar sus tradiciones, así como para manifestar y apoyar su causa por la paz y la autodeterminación en Nagorno-Karabaj.