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Igualdad de derechosEspaña

El beso a Jenni Hermoso: ¿gesto humano o muestra de poder?

23 de agosto de 2023

España ganó el Mundial Femenino de Fútbol, pero de lo que se habla es del beso de Luis Rubiales a la jugadora Jenni Hermoso. Se ha desatado una ola de reacciones que va más allá de lo deportivo.

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El presidente de la RFEF, Luis Rubiales, besa a Jennifer Hermoso durante la entrega de medallas del Mundial de Fútbol femenino, en Sydney, Australia.
El gesto de Rubiales con Hermoso ha desatado la polémica en España sobre las actitudes machistas hacia las mujeres. Imagen: Noe Llamas/Sport Press Photo/ZUMA Press/picture alliance

El pasado 20 de agosto, un gol de Olga Carmona en el minuto 29 desencadenaba la euforia en España, que veía cómo su selección femenina de fútbol hacía historia ganando el Mundial de Nueva Zelanda y Australia tras vencer en la final a la vigente campeona de Europa, Inglaterra. Lo que ninguno de los aficionados se esperaba es que tres días después de ese glorioso domingo, otro asunto más allá de la victoria de "La Roja" siga colándose en las portadas de medio mundo.

Cronología de un beso

Durante la ceremonia de entrega de medallas, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, agarró la cara de Jenni Hermoso con las dos manos y le dio un beso en la boca. La familiaridad del gesto quedó recogido por las cámaras y enseguida se hizo viral a través de las redes sociales.

El hecho no quedó ahí, sino que fue el inicio de una polémica que todavía resiste. Primero por algunos periodistas deportivos, que trataron de quitarle importancia a lo sucedido, comparándolo con el beso del Mundial de 2010 entre Iker Casillas y Sara Carbonero; después con unas declaraciones de Hermoso difundidas por la misma Federación en las que se minimizaba el hecho, al tiempo que el presidente de la RFEF contestaba a los que criticaron su comportamiento.

Ya en el propio vestuario y en mitad de la euforia por la victoria, la jugadora del CF Pachuca de México aparecía en un directo de la red social Instagramen la que se la escucha comentar que no le había gustado el gesto de Rubiales. "Eh, pero no me ha gustado, eh”, dice, e insiste: "pero qué hago yo, mírame a mí, mírame”.

El lunes, el presidente de la RFEF, en un video remitido por la propia Federación, reconoció que "seguramente" se había "equivocado" con ese beso. Rubiales reiteró que su gesto se produjo "en un momento de máxima efusividad" y "sin ninguna mala fe" por "ninguna de las dos partes", pero que ante tal "revuelo", tenía que disculparse "si hay gente que se ha sentido dañada", porque "no queda otra".

Esas declaraciones no han hecho más que empapar todavía más la polémica. 

¿Un gesto humano o un gesto de poder?

Medios, organizaciones feministas y expertos han señalado que el beso de Luis Rubiales se produce en mitad de un escenario profesional, por lo que no eran dos personas en igualdad de condiciones, sino parte de una jerarquía. "Es un hecho simbólico que desvela una gran actitud machista de fondo que se oculta constantemente, pero esta vez ha quedado a la luz", dice en una entrevista a DW Begoña Marugán, socióloga y profesora de la Universidad Carlos III de Madrid.

El hecho que ese gesto haya quedado tan expuesto demuestra "que socialmente hay una serie de comportamientos masculinos que están muy extendidos y que es necesario erradicar", y que si se ha avanzado es gracias al movimiento feminista, recalca.

Así y todo, en opinión de la socióloga, la situación hay que analizarla como una doble victoria. Por un lado, por el fútbol en sí, "ya que hace tan solo unos años ni se les consideraba jugadoras sino 'las chicas' del entrenador", dice. Y por otro, señala Marugán, en la reacción que está habiendo frente a este gesto del beso. "Los hechos suceden, pero lo importante es la reacción ciudadana, y creo que ésta está siendo muy importante", dice.

Avalacha de reacciones

El presidente en funciones del gobierno español, Pedro Sánchez, se pronunció el martes 22 de agosto sobre la polémica. "Lo que vimos fue un gesto inaceptable”, dijo, y añadió que las disculpas no eran suficientes y se debían dar más pasos.

También se expresó el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, durante un programa de la radio pública RNE, subrayando que "todos debemos de ser especialmente cuidadosos en nuestras actitudes y en nuestras acciones", y exigía al presidente de la RFEF que "dé explicaciones"

Fuera de España, el suceso ha dado pie a que estrellas del mundo del deporte, entrenadores y otras personalidades se posicionen sobre lo sucedido. El miembro del Consejo de Vigilancia del FC Bayern Múnich, Karl-Heinz Rummenigge apoyó el comportamiento de Rubiales, relativizando el escándalo.

Mientras, la jugadora y estrella del equipo estadounidense Megan Rapinoe, dijo en una entrevista al medio The Atlantic, que Hermoso había sido "físicamente acosada", y calificó a Rubiales de misógino y sexista.

¿Y ahora qué?

La presión se cierne sobre Rubiales para que dimita. "Estamos en un país en el cual existe la obligación de que los organismos públicos y las empresas privadas tengan protocolos para la prevención del acoso sexual. En el ámbito deportivo, existe este protocolo y lo tiene el Consejo Superior de Deportes (CSD), de tal manera que tiene que tomar medidas", recalca Marugán.

En este sentido, el ministro Iceta dijo el miércoles que si la RFEF no toma medidas, lo hará el Consejo Superior de Deportes (CSD).

Este mismo miércoles 23 de agosto, Hermoso, en su primera declaración oficial tras lo sucedido, ha hecho un llamamiento a la Federación para que "implemente los protocolos necesarios y vele por los derechos de nuestras jugadoras" y también al CSD, para que "apoye y promueva activamente la prevención e intervención ante el acoso o abuso sexual, el machismo y el sexismo", indicaba el comunicado publicado por el sindicato de jugadoras FutPRO.

La RFEF anunció que este viernes 25 de agosto se celebrará una reunión extraordinaria para tratar el asunto.

(dzc)