1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW
PolíticaFrancia

Francia acepta renegociar impopular reforma de las pensiones

14 de enero de 2025

El primer ministro Bayrou acepta una revisión de la reforma que propuso Emmanuel Macron para sumar apoyos en busca de del equilibrio financiero en el país, pero si no hay acuerdo en tres meses se mantendrá como está.

https://p.dw.com/p/4p8oX
François Bayrou, gesticula durante un discurso ante la Asamblea Nacional el pasado 17 de diciembre.
El primer ministro francés en una imagen de archivo.Imagen: Sarah Meyssonnier/REUTERS

El primer ministro de Francia, François Bayrou, anunció este martes (14.01.2025) que va a abrir un proceso negociador limitado a tres meses con sindicatos y patronal para revisar la reforma de las pensiones de 2023 impulsada por el presidente Emmanuel Macron, que retrasa la edad mínima de jubilación de 62 a 64 años, pero dijo que si no hay acuerdo se mantendrá como está. "Podemos buscar una nueva vía de reforma, sin tótems ni tabúes, ni siquiera la edad de jubilación, a condición" de no socavar el "equilibrio financiero", anunció Bayrou.

"He decidido volver a poner este tema sobre la mesa, con los interlocutores sociales, durante un breve período de tiempo", anunció Bayrou en su Declaración de Política General ante el Parlamento. En su discurso, el primer ministro excluyó la suspensión de la reforma, como le pedían los socialistas a cambio de su renuncia a votar una moción de censura para tumbar el Gobierno que ya ha anticipado que va a presentar con carácter inmediato La Francia Insumisa (LFI) de Jean-Luc Mélenchon.

Durante las elecciones legislativas anticipadas de 2024, la coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP) hizo campaña por su derogación y, pese a terminar en primer lugar sin mayoría clara, Macron no le encargó gobernar. Para intentar atraer al sector más moderado de esta alianza, representado por los socialistas, el nuevo jefe de gobierno se abrió al menos a rediscutir la reforma, a cambio de que estos no apoyen una censura del gobierno.

El primer ministro insistió en que en esa concertación de tres meses "se tienen que poder plantear todas las cuestiones", de forma que sindicatos y patronal podrán incluir "los temas que les preocupen", lo que significa que se podrá discutir una marcha atrás en el retraso de la edad de jubilación, pero a condición de garantizar el equilibrio financiero.

La cuestión financiera es crucial. Francia, la segunda economía de la Unión Europea, cuenta con elevados niveles de déficit y deuda público, por encima de los límites fijados en la zona euro, y busca evitar agravarlos. La incógnita ahora es si logró convencer a la oposición. A inicios de diciembre, las oposiciones de izquierda y de extrema derecha tumbaron al gobierno de su breve predecesor, Michel Barnier, cuando intentaba aprobar los presupuestos para 2025.

lgc (efe, afp)