Desde 1958, Italia era carta segura en las copas del mundo. Pero en Rusia 2018 eso ya no será así. Tras perder 1-0 en Estocolmo con Suecia y empatar 0-0 en Milán en el partido de vuelta, la Azurra, cuatro veces campeona del mundo, tendrá que ver el torneo desde casa.