Nunca antes llovió tanto en los Balcanes
Las fuertes precipitaciones e inundaciones son las peores en 120 años. Tanto en Serbia como en Bosnia-Herzegovina miles de personas han debido abandonar sus hogares.
Inundaciones mortales
Después de varios días de intensas precipitaciones, enormes extensiones de Serbia y Bosnia-Herzegovina están bajo el agua. En algunas zonas llovió en 40 horas más de lo que normalmente cae en tres meses, dijeron las autoridades. Hasta ahora se estima que han fallecido 40 personas debido a este embate de la naturaleza.
Calles y casas inundadas
Toda la zona a lo largo del río Sava, al oeste de Belgrado, se encuentra entre los lugares más afectados por las inundaciones. En Sabac, los niveles del agua ya alcanzan los 6,2 metros. Aún no se conocen los efectos reales de la tragedia. Pasarán días antes de que se puedan evaluar los daños.
Cientos de personas evacuadas
Solamente en Obrenovac hubo más de 4.000 personas que necesitaron ser rescatadas como consecuencia de lo que las autoridades ya han calificado como la peor inundación que golpea a la región desde que se tienen registros. En Croacia estas mismas escenas también se han repetido. A menor escala, Polonia igualmente ha sufrido por las lluvias.
Calles que ahora son verdaderos ríos
El transporte también se ha visto afectado en la capital de Serbia, que se encuentra bajo el estado de emergencia declarado por las autoridades. El primer ministro Aleksandar Vucic no dudó en describir el escenario como "la peor catástrofe natural que ha golpeado jamás a Serbia".
Las protecciones no aguantaron ni en Serbia ni en Bosnia
Pueblos y ciudades quedaron aisladas o literalmente bajo el agua luego de que los ríos superaran sus capacidades máximas en ambos países. Los militares organizaron la evacuación de unos 100.000 hogares, mientras se estima que unas 300.000 viviendas no tienen servicio eléctrico.
Avalanchas y agua en todas partes
Avalanchas, además de las aguas, afectaron a casas en la localidad de Topcic Polje, cerca de la ciudad bosnia de Zenica. Cientos de hogares fueron arrastrados o inundados cuando las aguas del río Miljacka, que atraviesa Sarajevo, superó las barreras de contención. Las lluvias han causado unos 300 aludes y se teme que también haya dejado al descubierto minas de la guerra de Bosnia de 1992-1995.
Todos ayudan a rescatar a los damnificados
Helicópteros, botes y vehículos anfibios han sido usados para ayudar a poner a los damnificados en zonas seguras. Hasta ahora se tiene registro de cinco personas que desaparecieron en las aguas, incluido un bombero que intentaba rescatar a unos vecinos. Se estima que la cifra de víctimas fatales aumentará con el paso de las horas.
Medios de transporte, cortados
Caminos y líneas de ferrocarriles se han visto muy afectados por las lluvias, y muchos vehículos de diversos tamaños permanecen bajo las aguas. El tráfico de trenes entre Serbia y Montenegro se encuentra suspendido.